La triste historia de Germán
¬ Juan Manuel Magaña martes 23, Sep 2014Política Spot
Juan Manuel Magaña
En el caso del potentado Germán Larrea es interesante ver lo que hace la casualidad. Tanta ha sido la inesperada adversidad en su contra, que ya le ocurre lo único que le faltaba: perder en su propio tribunal mediático.
Hasta hace unas semanas intocable, quiso la casualidad que una de sus mineras produjera en Sonora un desastre de tal magnitud que terminara por poner de cabeza a su mundo.
Al colocarse en una situación indefendible, el tercer hombre más rico del país, a decir de “Forbes”, tuvo que ser repudiado por el poder y por los suyos. Las cámaras, los micrófonos y las plumas que siempre lo hicieron fuerte, hoy tienen y difunden la triste narrativa de su debacle.
Se cuenta que Germán Larrea, en plena crisis de su Grupo México, se dejó ver en un evento público, un acto en que Banamex anunció una fuerte inversión, para saludar y tomarse la foto con el Presidente. Y dicen sus ex panegiristas que “ahí el Presidente, según las distintas versiones, le dijo al empresario: todo bajo la ley”.
Luego se describen sus dos semanas (y contando) de calvario: Primera caída: por fin la autoridad federal pudo obligar a Grupo México a crear un fideicomiso por 2 mil millones de pesos para hacer frente a su derrame en ríos de Sonora. Segunda: el grupo empresarial acaba de perder una batalla frente a otros empresarios para hacerse del control de Grupo Aeroportuario del Pacífico. Tercera: Germán Larrea, después de 11 años debe dejar su puesto de consejero en Televisa, por tener claro conflicto de interés. Y la historia de este descenso parece no haber terminado.
Y es más, el principal conductor del consorcio televisivo “revela” que el propio Emilio Azcárraga fue quien le pidió su renuncia a Larrea.
Curiosamente ahora, quienes siempre le cantaron loas -no de la oposición, no de la izquierda-, traen la historia condenatoria y completa de su caída. Es la historia de su proceder “confuso”, luego de que la mina Buenavista del Cobre, en Sonora, tuvo el derrame de sustancias tóxicas en los ríos de la entidad.
Confuso porque se critica que, primero, Grupo México rechazó que tuviera responsabilidad. Luego, culpó a las lluvias del derrame. Después, tuvo que ser una auditoría federal la que obtuvo la verdad: la responsabilidad era de Grupo México.
Se cuenta que la primera acción de Grupo México, lejos de asumir su responsabilidad, fue de pelear en tribunales, a través, ni más ni menos, que de Fernando Gómez Mont, ex secretario de Gobernación.
Pero, dicen los que saben (y trabajan para la televisora), tal acción dejó peor parado al grupo empresarial y hasta en el Congreso de la Unión pidieron quitarle la concesión minera por su irresponsabilidad con la comunidad.
La triste historia de Germán Larrea dice que en Televisa cayó bastante mal que después de largos 11 años donde fue consejero, sin avisar adentro ni darlo a conocer públicamente, fuera uno de los postores por una de las dos cadenas de televisión abierta que se van a licitar. Larrea posee información que ninguno de los otros contendientes conoce a profundidad, ni a detalle. Sabe que el agente preponderante, que es Televisa, va a tener que compartir infraestructura con los nuevos competidores, pero a diferencia de los demás conoce perfectamente qué partes específicas y dónde exactamente se pueden llevar las conexiones. Y sabe las políticas estratégicas de Emilio Azcárraga.
Así es como Germán Larrea tropezaba por segunda vez. Y ahora, hasta se sabe ya de los múltiples frentes empresariales que tiene abiertos el magnate, como lo es el conflicto en el Grupo Aeroportuario del Pacífico, GAP, por querer quedarse con el grupo que maneja 12 aeropuertos donde destaca el de Guadalajara. Y ahí se le augura al ambicioso otra derrota.
Pobre Germán, ¿no? Un desastre le cambió finalmente la vida.